Lo ideal era haber conseguido los tres puntos en el corazón del Valle, pero dadas las circunstancias es mejor uno que nada.
Todos sabemos lo difícil que es para el equipo Motilón poder marcar un gol y el compromiso frente al Cortuluá no fue la excepción, ni el Boliviano ni Carpintero pudieron concretar las oportunidades que se crearon para poder traernos los tres puntos.
Otra cosa positiva es que estamos contando también con el factor suerte, pues el Quindio perdió frente al Envigado y regresó al último lugar del descenso, es lamentable que tengamos que contar con el infortunio de los equipos rivales pero esa es la realidad, hoy mas que nunca se revive la frase del profesor Otero "el descenso es en noviembre".
El punto que se consiguió en la ciudad de Tuluá es importante siempre y cuando se sumen los tres puntos frente al Real Cartagena en la última fecha de la Liga Postobón; terminaríamos con veinte puntos el primer semestre y los directivos tendrían que empezar a conformar una nómina que nos garantice como mínimo treinta puntos en el segundo torneo del año para no tener que depender de la suerte de otros equipos.
En otras palabras, para no tener que sufrir la posibilidad de descender debemos clasificar a los cuadrangulares de fin de año, y de paso podríamos estar disputando nuestra segunda estrella, no es una locura pensarlo, hoy en el fútbol Colombiano cualquiera de los ocho equipos que llegue a la gran final tiene la oportunidad de coronarse campeón, en el 2006 entramos de sextos y fuimos campeones.
Por ahora es muy importante que toda la afición que de verdad ama esta causa Rojinegra, acompañemos a nuestro doblemente glorioso Cúcuta Deportivo a su último partido del semestre en el General Santander, tendremos la visita del Real Cartagena y nuestra presencia en la tribuna sera de vital importancia, apoyemos, exijamos para que después no tengamos que lamentarnos.